martes, 31 de mayo de 2011

LAS LECCIONES DEL DIBUJO - GÓMEZ MOLINA (PARTE 3)

El objetivo del artista plástico consiste exclusivamente en: dar forma y plasmar su experiencia creativa de la esencia fundamental de las cosas ya que hay diferentes maneras de aludir al objeto y múltiples características de los mismos.
Cada gesto, cada estructura, cada imagen remite a otra series de cadenas de gestos, de estructuras, de imágenes ordenadas en discursos anteriores. Dibujar es establecer un orden de evocaciones precisas, o en palabras de Baxandall, establecer un sistema de referencias desde las cuales volvemos a comprender toda nuestra historia anterior. Representar es por tanto, un acto controlado y difícil de evocaciones y silencios establecidos por medio de signos que somos capaces de descifrar por su preexistencia en la memoria histórica.
El dibujo sólo es posible si existe una intención comprensiva del objeto bajo un criterio que permita establecer una estructura unitaria de un fenómeno determinado. Así pues, el auténtico dibujo no está en el “dibujo final”, sino en la estrategia que dibuja la malla que articula los estratos de “dibujos” que componen el proyecto. Una acción que permite mantener la individualidad de cada uno de ellos, como un sistema contradictorio de posibles reconstrucciones, y como la clave de una reflexión diferenciada sobre la identidad de lo representado. La pérdida de los nombres, boceto, esquema, nota, apunte, encaje, esbozo, etc., su neutralización y su indeferenciación  en el genérico “dibujo” es una pérdida irreparable de posibles construcciones de sentido. La no diferenciación de actitudes fomenta la linealidad de su interpretación y le hace perder su valor de elemento clave de la complejidad de la representación.
La inmediatez de las imágenes contemporáneas es la herencia de la fotografía transformada no sólo en modelo de la realidad, sino también en modelo de conocimiento de ella misma; su afirmación como objeto es la herencia del diseño y de los medios de comunicación que tratan de diluir sus contradicciones en la lectura de su consumo, transformando los objetos en su espectáculo.

Un tema que no ha sido tratado hasta el momento es el del sentido artístico de la obra. Referente a este tema Lino Cabezas hace referencia a la variedad de técnicas utilizadas por los artistas más sobresalientes. Aunado a los métodos utilizados por algunos pintores (como el claroscuro por ejemplo) y el dominio de esta para lograr una psicología del personaje, la moral (en el sentido etimológico del término mos,moris, uso o costumbre) juega un papel determinante en el acto de dibujar al cambiar la época y las costumbres. Naturalmente, las ideas sobre belleza, perfección, estética y temas referentes a los modelos (siendo el desnudo el más abordado) son modificadas a lo largo de la historia por los diferentes modos de pensar de la sociedad.

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